En un sistema educativo en el que tratamos de ser cada día más democráticos, justos y solidarios debemos de crear de oportunidades equivalentes para todos los alumnos que llegan a las aulas, sin importar las necesidades especiales que tenga el estudiantado, debemos de ofrecer oportunidades equivalentes para obtener el máximo provecho de las posibilidades que estos estudiantes nos puedan dar y lograr así el máximo aprovechamiento en beneficio de sí mismos y de la sociedad en general.
Es interesante tener diversos ejemplos de formas en que se dan las clases, como por ejemplo la lectura menciona el proyecto Roma, donde son constantes los debates y los análisis que se realizan en las lecciones en el cual media un clima de convivencia y de investigación, en contraste por ejemplo con la escuela tradicional en donde el profesor se convierte en un simple transmisor de conocimiento el cual realiza una serie de evaluaciones y este profesional debe de ser una persona que sea un ejemplo para los alumnos que son el destinatario final de este conocimiento y que deben de ser pasivos en todo momento. El colegio debe de convertirse en una institución en donde cada vez se practiquen valores más humanitarios, solidarios y justos, y en donde no importen las características personales de los alumnos que participan en el proceso educativo, sino que más bien medien las condiciones más idóneas para que todos los seres humanos tengan cabida y sean recibidos de la mejor manera posible, es decir se deben de dar condiciones que permitan prácticas cada vez más inclusivas donde no se deje de lado a ninguna persona y donde todos participemos en la construcción de una sociedad cada vez más democrática.
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